12 septiembre 2009

Carnavalito

En la lejanía de los valles se oye un changuito cantar. Y es que la tierra es tan inmensa por esos pagos que no le ha podido cobijar. Lleva una quena andina colgada al cuello que entrelaza en las manitos, curtidas del andar. Sopla con fuerza de nogal, con alma inmortal. La melodía se expande entre los cerros, perdiéndose en el maizal. El eco resuena en mis oídos en forma de eterna postal. Ay! si vieras mi changuito como anhelo tu cantar, nota pura condensada en tu bello carnaval.