16 marzo 2009

Danza con palomas

Al principio dan vueltas,
se miran, se rodean sin rozarse.
El palomón la persigue arrastrándole el ala,
levanta la cola y, con el pecho erguido,
demuestra altanería exhibiendo su plumaje.
Ella afila sus garras pero jamás las muestra.
Se separan.
De nuevo merodean, danza de ochos sin fin.
Casualmente alguno pierde el paso,
vuelven a unirse.
En ese momento ambos se inflan de emoción,
y comienzan a picotearse desaforadamente.
En el trajín caen de la baranda.
Dichosos tórtolos aún saben como hacer para volar.

09 marzo 2009

Diversas aplicaciones del lunfardo

Ey don no tiene fuego?
que me falta el morlaco para el pucho,
el tinto y la viruta me están consumiendo
apenas tengo aguante para semejante bailantazo
esa mina es mía y me dio un taconazo
cuando le quise espantar lo´ buitres que le andaban echando el ojo
ahí casi que me enojo y la pongo de un corchazo

y acá me ve don, lindando con el lunfardo
como quien no quiere la cosa pero siempre anda en el bardo